DESPRECIO POR LA LIBERTAD Y POR LA DEMOCRACIA
Carlos A. López De Belva
No hay mejor manera de conocer los conceptos de libertad y de democracia que haber padecido su falta y haber puesto lo que había que poner, para su recuperación.
Ocurre con muchos conceptos. Yo estoy convencido que para interpretar en toda su dramática plenitud, la palabra o verbo VOLVER, uno se debe haber ido y no necesariamente, por su voluntad.
Lo mismo que miles de exiliados y exiliadas durante el terrorismo de Estado, conozco el significado, el sentido y el valor de los tres términos. Libertad, democracia, volver.
Para quienes fueron beneficiarios de los planes económicos del Estado terrorista, de este y de los anteriores, tienen una noción y una vivencia totalmente distintas. Los proyectos y sus beneficiarios siempre fueron los mismos. La diferencia, y no tanto, está en los ejecutores visibles, los encargados del trabajo sucio.
Tal vez el término más manoseado y despreciado hoy por hoy, sea el de libertad.
La frase hueca: VIVA LA LIBERTAD, en momentos en que la libertad no estuvo en riesgo, es patética. Porque libertad para morirse de hambre, libertad para ser despedido, libertad para privarse de lo esencial, libertad para comer una vez por día, libertad para renunciar a la prepaga, en definitiva, libertad para irse al carajo, qué tiene de libertad?
Libertad sin igualdad, no es libertad. Y sin Estado que regule, ninguna igualdad es posible. Y si hay algo que no les interesa a quienes se llenan la boca con ella, es la libertad.
Salvo la de ellos para esquilmar a la inmensa mayoría
Los que gozan de la libertad; según el concepto del gobierno que mayoritariamente votaron los argentinos y las argentinas, son los detentadores del poder concentrado mediático y financiero. Ellos sí pueden decir VIVA LA LIBERTAD CARAJO!
Libertad para ellos, carajo para los demás!
De qué libertad nos hablan cuando sacan un Protocolo fascistoide que impone marchar por la vereda? O que haya que pedir permiso para una reunión de tres personas? O cuando se proponen reformas al Código Penal que criminaliza a niveles insospechados, el reclamo por los derechos cuando los que proponen ese fascismo de papel mache los pisotean? Y no se diga que esto; que es pura demagogia punitiva, lo votó el 56% de la ciudadanía. Eso lo pide, lo festeja, el 30% del verdadero electorado de Javier Milei. El balotaje es otra cosa.
El actual Presidente hizo lo que nunca se animó, ni por cerca, hacer Alberto Fernández. Más bien todo lo contrario. Simplemente arrasó o intenta arrasar con todo.
Alberto no se animó a nada, lo de Vicentín fue un recule vergonzoso y vergonzante. Qué tienen en común? Que ambos Presidentes incumplieron el contrato electoral. Uno por defecto, otro por exceso.
El DNU 70/2023, el protocolo y la ley ómnibus están siendo debatidos en el Plenario de las tres comisiones que el ejecutivo se dignó designar, con la pretensión de que sus propuestas inconstitucionales, arbitrarias, absurdas, desestabilizadoras, se aprueben en treinta días.
Los integrantes de las tres comisiones en particular, todos sus colegas en general y fundamentalmente, el pueblo en su conjunto, están ante un desafío histórico.
Están en juego las instituciones del Estado de derecho y la democracia, así como el futuro de la Patria.
El “hay que darle tiempo” me suena a “los argentinos somos derechos y humanos”.
No hay margen para hacerse el gil. Milei dijo con brutal claridad lo que iba a hacer y lo está intentando. Lo votaste sabiendo que iba a hacer porque te lo dijo. Si vos no te informás, habiendo data de sobra y disponible, es tu problema.
No pienso ni por asomo, que el gobierno de Alberto Fernández haya sido bueno y que la gente no tenga razón de más para estar indignada. Pero con un mínimo de conocimientos históricos, se hubiera dado cuenta que los márgenes para luchar por los derechos, con el neoliberalismo o neocolonialismo, se achican en demasía. Y que la solución no era saltar al vacío.
Algunas intervenciones en el Plenario de comisiones son brillantes, otras patéticas. Alfredo Palacios y muchísimos legisladores y legisladores, incluso conservadores, se avergonzarían ante las exposiciones de esperpentos políticos que reniegan de la política, siendo que hacen política. Así de raro!
El “cambio” es lo mismo que viví con Alsogaray, con Rodrigo, con Martínez de Hoz, con Cavallo, etc. etc.
Estando en la secundaria vi los bombardeos al pueblo en la Plaza de Mayo, estando en la Facultad, la Noche de los bastones largos, más tarde el terrorismo de Estado y sus planes económicos y las consecuencias de esos planes de entrega, de transferencia brutal de capitales y su fuga, y más etcéteras.
Como decía Discepolín hablando con Mordisquito, a mi no me la vas a venir a contar.
Vienen días de mucho compromiso. Hasta el momento rescato las reacciones adversas al orden dictatorial que se pretende imponer por decreto, por parte de las instituciones de la abogacía.
El pueblo, una vez más, va a estar a la altura de su historia. A la dirigencia le vendría bien tenerlo muy en cuenta.
A un poder judicial que ha venido siendo funcional al poder real, despreciando la Constitución Nacional y las leyes, también-
La amenaza de Rodolfo Barra, Patricia Bullrich y otros funcionarios, con que se aprueban la ley y el DNU o viene el caos, merece el desprecio de todos los “argentinos de bien”.
Es momento de definiciones claras, no de acuerdos espurios.
En unos días veremos